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Primer Tiempo Legislativo

Hay dos dinámicas que conviven dentro del gobierno respecto de su agenda legislativa. La primera tiene que ver con los proyectos emblemáticos que se postularon durante la campaña, como la Reforma Tributaria o la de Salud. La segunda tiene mayor novedad y una relación significativa con la cantidad de proyectos ingresados por el presidente Piñera y que el actual Ejecutivo continuará tramitando, aunque seguramente con ajustes que se alineen con sus intereses programáticos. (*) Por Ian Mackinnon

16 mayo 2022

Cumplidos los dos primeros meses de la administración del presidente Gabriel Boric, y tras haber anunciado el fin del período de instalación, es posible dar cuenta de un par de tendencias dentro de su agenda legislativa. La primera era del todo esperable: la reforma tributaria, que ya inició su proceso pre legislativo con los denominados “Diálogos Sociales”, otros proyectos de reforma importantes comprometidos en campaña, como Salud y Pensiones, esperarán la conclusión del proceso constituyente antes de arribar al Congreso Nacional. Es más, en una de sus múltiples visitas a la Comisión de Salud del Senado, la ministra Begoña Yarza incluso dijo que la propuesta a su cargo no estaría sino hasta el 2023. Algo similar fue transmitido por el ministro de Obras Públicas, Juan Carlos García, hace algunas semanas cuando fue a presentar sus prioridades a Valparaíso, incluyendo la gobernanza de las aguas.

En ese sentido, los parlamentarios pueden entender y esperar el inicio de estas grandes discusiones, pero no por ello se quedarán de brazos cruzados sin legislar y menos en el Senado donde la oposición domina en varias comisiones. Acá el riesgo para el Gobierno está en verse obligado a seguir el ritmo de las bancadas y no el suyo propio.

La segunda tendencia tiene mayor novedad y tiene relación con la significativa cantidad de proyectos ingresados por el presidente Sebastián Piñera y que el actual Ejecutivo continuará tramitando, aunque seguramente con ajustes que se alineen con sus intereses programáticos. Sólo por mencionar algunos ejemplos, la ministra de la Mujer y Equidad de Género, Antonia Orellana, confirmó en la comisión de Trabajo del Senado que activarán la discusión de proyecto de Ley sobre el derecho a sala cuna y la creación de un fondo solidario de sala cuna. Esto está contenido en el boletín 14782-13 presentado en enero de este año el cual, siguiendo las declaraciones de la Ministra, avanzará a través de una mesa de trabajo entre el Congreso, el Ejecutivo y otros agentes, con miras a resolver los principales nudos detectados; junto con el ingreso de indicaciones para fortalecer el derecho a la sala cuna, considerando una perspectiva de infancia, de género y de derechos humanos. Por su lado, Bienes Nacionales apoyará que se establezcan sanciones a quien dificulte la fijación de las vías de acceso a playas de mar, ríos y lagos, según el boletín 12551-12. O el de administración del borde costero y concesiones marítimas, de acuerdo al boletín 8467-12, presentado por Piñera en su primer período. En la misma línea hay altas expectativas respecto de lo que resulte de la reactivación de la tramitación de la Reforma Constitucional que regula estado de alerta para prevenir daños a infraestructura crítica, según el Boletín 13086-07. Presentado en noviembre de 2019 en pleno “Estallido Social” pero congelado desde septiembre de 2020, hoy parece tener una nueva oportunidad como herramienta para configurar un Estado de Excepción intermedio que permita el apoyo de las Fuerzas Armadas para la protección de vías y caminos. Este también puede ser un buen ejemplo del riesgo mencionado en la primera tendencia: los integrantes de la Comisión Mixta ya notificaron al Ejecutivo que podrían avanzar con sus propias indicaciones si es que hubiera alguna tardanza en presentar la propuesta. Esto puede leerse como una tendencia positiva, lejos quizás de las posturas menos conciliadoras con el ciclo anterior.

En resumen, en este “primer tiempo” legislativo, como lo tituló el ministro Segpres Giorgio Jackson a finales de abril, las claves podrían venir por el lado de estas dos dinámicas: gestionar la espera del resultado constituyente antes de partir con la discusión de los mayores compromisos de campaña; y promover propuestas ingresadas por el gobierno pasado en diferentes materias. Veamos si la dirección del diseño mantiene su curso en los próximos meses.

 

(*) Cientista Político de la Universidad Católica de Chile y Master of Science International Public Policy de University College London de Inglaterra. Socio de Azerta.