@Actualidad

¿Los Bitcoin en jaque?

Las criptomonedas se han convertido en el instrumento favorito de cibercriminales para cometer distinto tipo de estafas. Y es que este tipo de divisas no están reguladas por los gobiernos, los grandes bancos o los fondos de inversión, sino que más bien por inversionistas privados permitiendo con más facilidad los ciberengaños.

31 marzo 2022

Las estafas piramidales se están apoderando de los Bitcoin. Según el informe “Reporte de Criptocrimen 2022”, elaborado por la plataforma de análisis de Chainalysis, los delitos basados en criptodivisas alcanzaron un máximo histórico durante 2021. El informe asegura que las carteras con direcciones ilícitas recibieron US$ 14.000 millones, frente a los US$7.800 millones en 2020.

¿Por qué es fácil estafar con criptomonedas? A diferencia de las monedas convencionales, este tipo de divisas no están reguladas por los gobiernos, los grandes bancos o los fondos de inversión, sino que más bien por inversionistas privados. “El Bitcoin tiene «vida» fuera de la red y se intercambia por bienes y servicios reales, e incluso por dinero en efectivo”, asegura BBC.

Su valorización a lo largo de los años: su valor comenzó a dispararse en 2013, tras el «corralito de Chipre», durante el cual se cerraron las oficinas y depósitos bancarios y el Bitcoin pasó a ser un «valor refugio», como lo fue el oro en su momento, explica el medio británico.

Técnicas de secta: la policía nacional española desarticuló hace pocos meses una organización presuntamente dedicada a realizar estafas piramidales a través de cursos de formación en criptomonedas. “Los integrantes de esta red se dedicaban a persuadir a jóvenes algunos de ellos menores de edad con la promesa de que después de un curso se iban a convertir en verdaderos «tiburones» financieros”, informa la cadena SER. A las víctimas las abordaban en parques públicos o en eventos presenciales organizados en hoteles. El medio español agrega que “según agentes cercanos a esta investigación, los reclutadores llegaban a utilizar técnicas de persuasión propias de una secta y de hecho quien denuncia el caso es una asociación de víctimas de sectas”.

¿Cómo estafaban?: la red llegó a captar a 2.500 personas con estudios básicos, a quienes daban un curso de formación financiera y convencían de que en poco tiempo podían ser ricas invirtiendo en criptomonedas y manejando dinero en bolsa. “Sin embargo todo era una estafa piramidal, porque una vez que estaban matriculados la enseñanza pasaba a tener un papel secundario y la organización se dedicaba a presionarlos para captar a nuevos estudiantes”, asegura el medio español. Las cantidades económicas exigidas por la organización para la inscripción en la formación financiera consistían en un primer ingreso de 200 euros y una cuota mensual de 150 euros. Para que la captación fuese eficiente, se les proporcionaba instrucción y guiones para abordar y persuadir a nuevos miembros potenciales.

Consejos para no caer en la trampa: cuando la condición necesaria es reclutar gente, hay que prestar atención, porque éste suele ser un ingrediente que no falta en las estafas piramidales. “Se le pide al usuario que convoque a nuevos usuarios que también deben, por su parte, seguir reclutando gente. Las estafas piramidales buscan aprovecharse de las redes de contacto de los miembros que van sumando. Este esquema indefectiblemente se colapsa cuando dejan de entrar personas”, asegura Infobae. Otra alerta relevante es tener cuidado con las billeteras virtuales falsas, ya que aquellos comercios u organizaciones que comienzan a aceptar estas monedas, suelen depositarlas en una billetera virtual. Los ciberdelincuentes crean un Malware que simula una billetera, para ser descargada y así apoderarse de las criptomonedas. Otra manera de cometer fraude es con los Ransomware, es decir un software malicioso que se instala en el computador mediante el cual los hackers secuestran datos de las organizaciones y los mantienen cautivos hasta que se les pague un rescate, que por lo general, es en Bitcoin.